1 de mayo de 2014

Pavlova Celestial para el Día de la Madre

Este año tengo otra propuesta diferente para hacer el día de la madre.



Como ya os he comentado, a mi madre no le gusta ni la mantequilla ni el dulce, así que pensé en preparar una Pavlova con sabor a limón acompañada de fresas, plátano y nata sin azucarar.



El resultado es un poco dulce (cómo no, tratándose de un merengue), pero al menos mi madre le ha pegado un bocadito. ¡Y eso era todo lo que podía pedir!

Aunque bueno, si a Ancor le gusta el invento... ¡Eso si que sería un éxito absoluto!
A ver qué me dice...




Pero vamos con la receta.

Yo he usado 9 claras de huevo y 600 gr de azúcar glass ni más ni menos, con lo que la cantidad de merengue obtenida me ha dado para una Pavlova normal, otra doble y dos bandejas de suspiritos (he aprovechado para practicar con la manga pastelera). 




La receta para 1 Pavlova decente sería de unas 3 claras de huevo y daría para unas 6 u 8 raciones como Dios manda, así que os voy a poner las cantidades de acuerdo a esto y si queréis hacer el doble, pues simplemente multiplicáis.

Quise hacer el merengue de color azul para representar el cielo. Así, la nata serían las nubes, y las fresas, regalo de los dioses :)






Pavlova de Limón con Fresas, Plátano y Nata Montada


Para unas 6 u 8 raciones:

Ingredientes
  • 3 claras de huevo tamaño M a temperatura ambiente (frescas, no pasteurizadas)
  • El doble de su peso en azúcar glass (unos 220 gr)
  • 1 cucharadita de maicena
  • 1 pizquita de sal
  • 1 cucharadita de vinagre de vino blanco o la misma cantidad de zumo de limón
  • 2 cucharaditas de extracto natural de limón (o al gusto)
  • 1/2 cucharadita de colorante azul en pasta (yo usé el Ice Blue de Sugarflair) (el colorante es opcional)
  • fresas
  • 1 plátano
  • 200 ml de nata para montar (con un mínimo del 30% de materia grasa)
  • 1 cucharada de azúcar glass
  • 4 gr de estabilizante para nata
  • 1 cucharada de mermelada de fresa (opcional)

Esta es la versión doble

Entre las dos capas de merengue, hay una capa de nata y fresas, lo que pasa es que no asoma



Preparación

  1. Montamos las claras a punto de nieve bien firme (progresivamente, aumentando poco a poco la velocidad)
  2. Añadimos el azúcar cucharadita a cucharadita, sin parar de batir
  3. Ponemos el horno a precalentar a 180º
  4. Cuando obtengamos un merengue firme, añadimos la maicena mezclada con la sal, sin dejar de batir
  5. Añadimos el limón o el vinagre
  6. Añadimos el colorante
  7. Batimos bien
  8. Preparamos un trozo de papel vegetal (de calidad, porque vamos a tener la Pavlova hora y media en el horno) al que le dibujaremos con lápiz un círculo en el reverso (podemos ayudarnos de un plato)
  9. Extendemos el merengue sobre el papel, intentando no salirnos de los bordes del círculo
  10. Con ayuda de una espátula, extendemos uniformemente el merengue y dibujamos picos en la superficie exterior, para dar textura, intentando crear un nido en el centro
  11. Horneamos primero 5 min a 180º sin aire, y luego bajamos la temperatura a unos 110º y horneamos durante unos 75 min (vigilando el horno)





  1. Mientras, montamos la nata hasta que coja consistencia
  2. Mezclamos el azúcar glass con el estabilizante
  3. Tamizamos el azúcar sobre la nata
  4. Terminamos de montarla (no tardará nada, gracias al estabilizante) y la guardamos en la nevera
  5. Lavamos y cortamos las fresas en rodajas (reservamos las más pequeñas sin cortar, con el rabito incluido)
  6. Pelamos y cortamos el plátano y lo rociamos con limón para que no se oxide
  7. Cuando el horno haya terminado y lleve como 2 horas enfriándose del todo, lo abrimos y sacamos la bandeja con la Pavlova, y la dejamos enfriar del todo
  8. Justo cuando vayamos a servir la tarta, untamos la nata en el "nido" y depositamos las frutas encima
  9. Si queremos ponerle mermelada, primero la batimos con un tenedor para quitarle un poco de "gelatinosidad" (toma ya) y luego la vertemos en los huecos entre las fresas
  10. Degustamos
  11. Me contáis qué tal os ha parecido





Consejos:
  • Usad claras frescas. Las pasteurizadas tardan mucho en montar. (Con las yemas podéis hacer crêpes, o crema pastelera)
  • Procurad que las claras no tengan nada de yema, que si no no montarán bien.
  • El bol de la batidora debe estar bien limpio y seco (parece una perogrullada, pero es importante).
  • No abráis el horno ni durante ni después de hornear la Pavlova. Dejad que se enfríe totalmente dentro del mismo.
  • Es importante tamizar y añadir el estabilizante cuando la nata esté casi montada, y no antes, porque si no, le saldrán grumos.



¡Por cierto! ¿Sabéis qué he descubierto? Que las muelas del juicio no reciben el nombre del "Juicio Final", sino de la madurez (juicio=conocimiento). Y yo que pensaba que tenían un significado mucho más tenebroso...




Pues bueno, probad a hacer la Pavlova y me contáis qué tal :)

Besos.


Con cariño,


Ana



6 comentarios:

  1. Esta pavlova es azul como el mar azul.... ¡Qué buena pinta! Seguro que esta buenisima ;)

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    1. ¡Sí! Es que el azul es mi color favorito, y procuro añadirlo a todo lo que puedo :)
      Y como quería hacer un postre liviano y celestial...
      :)

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  2. Es muy curiosa, tiene buena pinta, pero me empacho solo de verla. No me creo que no sea muy dulce.

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    1. ¡Jajaja! Estaba dulce, pero como cualquier merengue. Lo bueno es que la nata no estaba dulce, y si coges fresas ácidas contrarrestan bastante el dulzor.
      :)

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  3. El merengue solo está buenísimo, así que con fresas ya debe estar para morirse!!

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    1. ¡Ya ves! Y eso que yo no soy muy de merengue. Pero he de decir que estaba muy rica :)

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