23 de junio de 2014

Tarta-hamburguesa cubierta con fondant

Buenas tardes a todos:


Hoy os voy a enseñar un par de tartas que hice la semana pasada para dos cumpleaños. El motivo es el mismo: una rica hamburguesa. Pero el acabado es diferente, y apto para todos los que se animen a prepararlas. Esta está cubierta con fondant. En la siguiente entrada os mostraré la que no lo está.


Hace tiempo que quería hacer una tarta-hamburguesa. Ancor me proponía que comprase hamburguesas, las triturase y esculpiese una hamburguesa con la masa, pero la idea no parecía viable, así que me puse a investigar por Internet para ver ejemplos de tartas-hamburguesa que me inspirasen. Lo hice y encontré de todo. 


Fue muy instructivo, pero al final me di cuenta de que si quería que el resultado fuese realista, tenía que buscar un original. Así que me puse a buscar fotos de atractivas hamburguesas por la red. Y mi tarta se tenía que parecer a una de aquellas deslumbrantes y voluptuosas hamburguesas, con sus ingredientes y su pan con sésamo. 


¿Y por qué tuve que buscar en la red una hamburguesa? ¿No era mejor copiarla al natural, es decir, comprarme una y estudiarla tal cual? ¿Tan difícil era hacer algo así?

Y ahora va cuando os tengo que confesar una cosa...


No me gustan las hamburguesas.


Espero que esto no sea motivo para que dejéis de seguir el blog. Y, si sirve de ayuda, confesaré que las patatas fritas sí que me gustan... mucho.

Pero es que yo he sido siempre de comer poca carne, exceptuando el maravilloso jamón serrano, por supuesto.


Puestos a confesar secretos íntimos, os diré que la primera hamburguesa de hamburguesería típica (véase, McDonalds o Burguer King) que comí fue a la que me invitó Ancor el día que me pidió salir. Y no me la terminé.

Sí, mi primera hamburguesa tipo comida rápida fue hace 4 años y medio. Y creo que solo me terminé el pepinillo.


Ah, pero las hamburguesas de pavo y manzana que hace mi madre sí, esas sí que me gustan. No hay punto de comparación.

Pero bueno, no me enrollo más. Paso a contaros un poco más sobre la tarta.


La receta del bizcocho-pan es la de la coca en llanda de mi tía Carmen, pero con ralladura únicamente de naranja y con menos cantidad de aceite. Como la hice a ojo (como siempre), no me atrevo a ponérosla. Así que, si conocéis una receta de bizcocho básica, esponjosa y que os guste, utilizadla.

Aquí podéis observar que no tenía Crisco a mano para evitar que se me agrietase el fondant.

El brownie-hamburguesa también lo hice a ojo, y sin frutos secos, que tampoco me gustan ("¿Que no te gustan los frutos secos?¿Pero a ti qué demonios te pasa?"). Pero eso es otra historia que ya os contaré en otra entrada. Eso sí, para el brownie utilizad cacao en polvo de calidad, que eso es importante.


Para ensamblar la tarta solo necesitáis ganache de chocolate, la que más os guste. Yo hice una de chocolate puro Valor, 50% chocolate 50% nata. Tenéis que prepararla con antelación y dejarla enfriar a temperatura ambiente (aunque con este calor, también podéis meterla en la nevera, siempre que la saquéis un par de horas antes de usarla). Y también le puse una pajita resistente en el centro, para evitar que se desmontase durante el transporte, aunque la ganache hizo muy bien su papel de cemento :)


Y solo nos quedan el queso, la lechuga, el tomate, la cebolla y el sésamo, todo hecho con fondant. Y el ketchup, que está hecho con chocolate de color rojo (podéis usar Candy Melts).

El pan está forrado con fondant sobre la ganache, y espolvoreado con colorante en polvo marrón, pero solo en la parte alta, para simular la corteza tostada.


Para hacer el bizcocho-pan, necesitáis dos moldes del mismo diámetro, uno redondo plano y otro en forma de semicírculo (yo usé un cuenco de Pírex).

Y ya está. Como yo lo hice todo a ojo, no sabría deciros medidas o cantidades, pero si tenéis alguna duda, no dudéis en preguntar. Os contestaré encantada.


Muchos besos y ánimo con la recta final universitaria (no, yo tampoco he terminado aún).

Con cariño,

Ana



Aquí con Mogue, uno de los peluches de la familia.


Le tuvimos que decir que era de tarta, porque si no se nos desmaya.


Espero que os guste.


¡Esperad, que se me olvidaba el corte!



Aquí, con la pajita que hacía de eje central.

Disección total.


2 comentarios:

Estamos encantados de recibir vuestros comentarios. Para nosotros son muy importantes porque gracias a ellos podemos seguir mejorando el blog. ¡Así que no dejéis de comentar!